miércoles, 19 de noviembre de 2014

LAS PROMESAS DE LOS DEVOTOS DE LOS DOLORES DE NUESTRA SEÑORA. Santa Isabel de Hungría


En el libro "Las Glorias de María" de San Alfonso María de Ligorio se dice lo siguiente: "El mismo Jesús reveló a la beata Mónica de Binasco que él se complace mucho en ver que se siente compasión por su Madre, y así le habló: Hija, agradezco mucho las lágrimas que se derraman por mi pasión; pero amando con amor inmenso a mi Madre María, me es sumamente grata la meditación en los dolores que ella padeció en mi muerte.
Por eso son tan grandes las gracias prometidas por Jesús a los devotos de los dolores de María. Refiere Pelbarto haberse revelado a Santa Isabel, que San Juan, después de la Asunción de la Virgen, ardía en deseos de verla; y obtuvo la gracia pues se le apareció su amada Madre y con ella Jesucristo. Oyó que María le pedía a su divino Hijo, gracias especiales para los devotos de sus dolores. Y Jesús le prometió estas gracias especiales:
  1. Que el que invoque a la Madre de Dios recordando sus dolores, tendrá la gracia de hacer verdadera penitencia de todos sus pecados.
  2. Que los consolará en sus tribulaciones, especialmente en la hora de la muerte.
  3. Que imprimirá en sus almas el recuerdo de su Pasión y en el cielo se lo premiará.
  4. Que confiará estos devotos a María para que disponga de ellos según su agrado y les obtenga todas las gracias que desee".
San Alfonso María de Ligorio, Las Glorias de María, Disc. 9, 6