LOS
VALORES SOCIALES: LA JUSTICIA
Reflexión
diaria del Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia (n. 201-203)
En
el mundo actual, la justicia es un valor que junto con la misma virtud cardinal
es de capital importancia, ya que a pesar de las proclamaciones de derechos del
hombre, el valor de la persona y su dignidad están seriamente amenazados por la
difundida tendencia de la utilidad y del tener.
La
justicia no es una simple convención humana, ni por el voto de mayorías, ni por
principios partidistas o grupo de presión. Lo “justo” está determinado por la
identidad profunda del ser humano, creado a imagen y semejanza de Dios.
La
virtud de la justicia consiste en la constante y firme voluntad de dar a Dios y
al prójimo lo que les es debido. Es importante recordar la importancia de dar “lo
que es debido”, pues a veces se entiende la justicia como dar a cada uno lo que
merece, y no siempre lo que se merece es lo debido. El asesino merece el la
pena de muerte, pero la justicia buscará el arrepentimiento, la expiación y la
conversión de ese delincuente. Dios obra su justicia así con nosotros, pues no
nos da lo que merecemos, sino lo que en su justicia no es debido: la
misericordia y el perdón.
Desde
el punto de vista de la persona entendemos la justicia como la actitud de reconocer al otro como
persona. Y en el mundo de las relaciones sociales; la justicia se convierte en el
criterio determinante de la moralidad.
La justicia ha de ser
motivada por la solidaridad y la caridad, solo así será posible la paz: paz que sólo se
alcanzará con la realización de la justicia social e internacional, y además
con la práctica de las virtudes que favorecen la convivencia y nos enseñan a
vivir unidos, para construir juntos, dando y recibiendo, una sociedad nueva y
un mundo mejor.
