sábado, 21 de enero de 2017

ROSARIO EN EL OCTAVARIO DE ORACIÓN POR LA UNIDAD DE LA IGLESIA



21 DE ENERO
LA UNIÓN DE LOS PROTESTANTES
A LA VERDADERA IGLESIA
Monición inicial. Ofrecemos este rosario por los cristianos seguidores de las falsas reformas del siglo XVI llevadas a cabo por Lutero, Calvino y Zwinglio entre otros y que influenciados por el racionalismo han debilitado su identidad cristiana produciendo una fe subjetiva e individual. Pedimos para que sus pastores y teólogos, libres de presupuestos filosóficos falsos, estudien con diligencia la Sagrada Escritura y la Tradición, reconozcan sus errores y vuelvan a la unidad de la Iglesia donde está la plenitud de la doctrina y de los medios de salvación. 
MISTERIOS GOZOSOS
1.       La encarnación del Hijo de Dios.
El Hijo Eterno de Dios se ha hecho hombre para unir a todos los hombres en la unidad de su Iglesia.
2.       La visitación de nuestra Señora a su prima santa Isabel.
La vivencia de la caridad fraterna ayuda a fortalecer la unidad de la Iglesia y es testimonio ante el mundo de que Jesucristo es el enviado del Padre.
3.       El nacimiento del Hijo de Dios en el portal de Belén.
Ante el anonadamiento de Dios que se hace Niño no hay lugar para la envidia, el odio, la rivalidad, la separación…
4.       La presentación del niño Jesús en el templo.
Como el anciano Siméon, la Iglesia sigue proclamando: Jesucristo es el Salvador, presentado ante todos los pueblos y luz para alumbrar a las naciones.
5.       La pérdida del Niño Jesús y su hallazgo en el templo.
Como María y José, hemos de buscar a Jesús, él es la misma Verdad y nuestro Maestro, principio de la unidad.

ORACIÓN PRESCRITA POR S.S. BENEDICTO XV
Indulgencia plenaria si se realiza durante los 8 días,
indulgencia parcial por cada día.

Ant. Ut omnes unum sint, sicut tu, Pater, in me, et ego in te; ut et ipsi in nobis unum sint: ut credat mundus quia tu me misísti. (Jn 27, 21)

V/. Ego dico tibi, quia tu es Petrus.
R/. Et super hanc Petram ædificábo Ecclésiam meam.

Orémus.
Domine Jesu Christe, qui dixísti Apóstolis tuis: Pacem relínquo vobis, pacem meam do vobis: ne respícias peccáta mea, sed fidem Ecclésiæ tuæ; eámque secúndum voluntátem tuam pacificáre et coadunáre dignéris: Qui vivis et regnas Deus in sæcula sæculórum. R. Amen.
Ant. Que todos sean una misma cosa, como tú, oh Padre, estás en mi y yo en ti; que sean ellos una misma cosa en nosotros, para que el mundo crea que tu me has enviado.

V/. Yo te digo: Tú eres Pedro

R/. Y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia.

Oremos.
Señor nuestro Jesucristo, que dijiste a tus apóstoles: la paz os dejo, mi paz os doy, no mires nuestros pecados, sino la fe de tu Iglesia; y dígnate conservarla en la paz y en la unidad según tu voluntad. Que vives y reinas por los siglos de los siglos.
R. Amén.