domingo, 8 de enero de 2017

TÚ, SEÑOR TE PRESENTAS ANTE NOSOTROS, PECADORES, PARA QUE TE PODAMOS ENCONTRAR MÁS FÁCILMENTE. Santo Tomás de Villanueva




Comentario al Evangelio


 FIESTA DE LA SAGRADA FAMILIA
Forma Extraordinaria del Rito Romano
Jesús se perdió durante las fiestas. No se pierde en el destierro y se pierde en una fiesta. Dios no suele perderse en las tribulaciones, sino en la prosperidad. En los días de fiesta creemos que se nos permiten todas las diversiones prohibidas. Parece que son días a propósito para crucificar al Señor con nuestros pecados. El día de la santificación lo convertimos en día del mal. Tempus faciendi, Domine: dissipaverunt legem tuam (Ps. 118,126).
Como se le encuentra. Te he buscado con todo mi corazón. (Ps. 118,2)
Pensando que estaba en la caravana. ¡Cuántos hay que al llegar la noche de su muerte se darán cuenta de que no eran tan buenos como creían! Jesús no estaba con ellos.
Al cabo de tres días lo hallaron. “Hablaras del extremo dolor de la Virgen María, cuando perdió a Jesús y de su gozo al encontrarlo. Lo dirás con unción. María lo encontró a los tres días, David, después de pecar, con tres silabas: peccavi…Son los tres días de la penitencia, a saber: arrepentimiento, confesión, satisfacción”.
Apenados andábamos buscándote. María estaba afligida por encontrarse sin Jesús. Nosotros buscamos apenados una moneda que se pierde, y perdemos el alma sin advertirlo. “Perdemos a Dios por un placer momentáneo, por un juicio falso, y tu Señor, lleno de misericordia, te presentas ante nosotros, pecadores, para que te podamos encontrar mas fácilmente y nos salvemos, sin que hayamos tenido celo para buscarte”.
Les estaba sujeto. Admirad lo que os parezca; la condescendencia del hijo o la sublimidad de la madre. Aprende, hombre; aprende, tierra; aprende, polvo a obedecer. Siempre que te empeñas en mandar, te empeñas en ser algo más que Dios, y entonces sí que puede decirse que no entiendes a Dios.
Jesús crecía en sabiduría, edad y gracia. La luz del sol es la misma al amanecer y al mediodía, pero su calor es mucho mayor. La ciencia y la gracia de Dios, eran la misma, pero sus manifestaciones más perfectas. No creas, hombre, que avanzas por tus fuerzas. Avanzas por la gracia de Dios, que te hace subir. Aprovéchala.
Extractado del sermón de Santo Tomas de Villanueva
Transcripto por Dña. Ana María Galvez