martes, 20 de junio de 2017

MES DE JUNIO EN HONOR AL CORAZÓN DE JESÚS (20)




ORACIÓN PREPARATORIA PARA TODOS LOS DÍAS:
A ti, Jesús, que vives y reinas con Dios Padre y el Espíritu Santo, elevamos este acto de fe, de esperanza, adoración y caridad porque en tu Sagrado Corazón reconocemos la manifestación plena de tu amor por nosotros. Acepta también nuestro deseo de reparar tu Corazón por tantas ofensas e indiferencias.
Con el Ángel de la Paz y todos los coros de los ángeles, con los santos Francisco y Jacinta Marto y todos los santos, unidos a tantas almas que te han amado dignamente, decimos:
Dios mío, yo creo, adoro, espero y os amo.
Os pido perdón por los que no creen, no adoran, no esperan y no os aman. (tres veces)

Jesús, manso y humilde de corazón,
R/. Haz nuestro corazón semejante al tuyo.

20. TODA LA VIDA DE CRISTO ES CRUZ Y MARTIRIO 
De los escritos del beato Juan Bautista Scalabrini, obispo italiano
Jesucristo es el gran modelo de la vida cristiana; modelo, oh mis queridos, tan esencial que, como afirma San Pablo, en la semejanza con Él consiste el secreto de nuestra predestinación. Considerando esto, yo pregunto: ¿cuál fue el camino que Él siguió para subir al Cielo? ¿Quizás el de la riqueza, de la gloria, del placer, o más bien fue el de la pobreza, de la humillación, del dolor? ¡Toda su vida, escribe Crisóstomo, no fue otra cosa que cruz y martirio! ¡Desde el primero hasta el último instante, cuánta miseria, cuántas incomodidades, cuántas fatigas, cuántas persecuciones, cuántas calumnias, cuántos sufrimientos, cuántos dolores! Y, ¿cómo después de ello no reconocer en la penitencia nuestro verdadero bien, el camino más corto, seguro, único para nuestra salud?

PARA FINALIZAR:
Todos juntos recitamos el acto de reparación enseñando por el ángel a los pastorcitos de Fátima:
Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo,
os adoro profundamente
y os ofrezco el preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad
de Nuestro Señor Jesucristo,
presente en todos los sagrarios de la tierra,
en reparación de los ultrajes, sacrilegios e indiferencias
con que El mismo es ofendido.
Y por los méritos infinitos de su Sacratísimo Corazón
y del Corazón Inmaculado de María,
os pido la conversión de los pobres pecadores.

Sagrado Corazón de Jesús, R/. En vos confío.
Inmaculado Corazón de María, R/.  Sed la salvación mía.
Ave María Purísima, R/. Sin pecado concebida.